martes, 13 de octubre de 2009

Cancelo el Jueves

/Conversación telefónica entre Silvi (posible psicóloga, amiga, o familiar) y Helena/

Lo que me pasa Silvi, es que me da la sensación de minusvalidez. Me siento como otra persona, otra que no es como yo quiero ser. Y la quiero contener y le pido por favor, que no se muestre, que no sea, pero a veces la sensación de necesidad es muy fuerte.

Yo la tenía domesticada, pero a veces exige tanto de mí, y bueno… la solté, dejé que jugara un ratito por el jardín. Cuando volvió estaba toda sucia y tenía una sonrisa en la cara, pero no era de esas sonrisas que a una la ponen contenta, o que le causan ternura. Sabes lo que me pasó a mi Silvi, lo que me paso cuando la ví?

Ganas de matarla! Eso sentí, te lo juro. Cómo se atreve? A querer desarmar todo lo que había construído!? Si, ya sé que me vas a decir… que hice bien en intentar, que lo que me paraliza es el miedo, que si todos pueden porqué yo no? Pero no es miedo lo que yo siento. (...) No, en serio te digo. Lo que yo siento es asco! Eso siento, repulsión, ganas de irme corriendo a una cueva como ese personaje del libro de Suskind, como se llamaba? (...)El Perfume, ese mismo! Ganas de irme a una cueva como esa y estar sola. Para acordarme de lo que me olvidé, acordarme de cómo era antes de ver a esa otra a la cara.

Cómo puede ser parte mía, si yo no la quiero? Siempre me pregunté si nosotros somos lo que somos y lo tenemos que aceptar sin más; o si podemos moldear nuestra forma.
Alguna vez te miraste desde muchos ángulos? Desde afuera tuyo? Nunca te transfiguraste? Yo lo hacía antes con un espejo. Me miraba por un rato largo, que nunca supe si eran minutos, o si eran horas. Y miraba mi imágen primero, como la recuerdo, como todos la ven. Pero después de un rato de mirarme fijo y de reojo a mi alrededor, me sentía fuera de mí. Me miraba desde afuera.

Ahora me veo a veces desde afuera también, y me pasa que me voy tanto que me olvido que no estoy, que me fui. Entonces, tengo que retomar de nuevo el camino de vuelta.

Y nunca supe, si en realidad es que no quiero algo porque tengo miedo, o si no lo quiero porque no va. Es esa confianza en el sentir propio, del cual nadie ajeno puede opinar, nadie puede entender.

(...)Sí, me siento mal conmigo, o con la que fui por un lapso de tiempo. Porque nunca quise sentirme así, pero como te dije, la necesidad a veces pide a gritos ser escuchada. Yo nunca quise, vos sabés. Pero también sabés que soy muy dual. Tengo dos partes irreconciliables que me piden cosas, y exigen y demandan… y muy de vez en cuando me dan alguna licencia.
(...)Si, son todas partes mías, pero sólo quiero a una. La necesidad de ser entendida, me volvió loca! Mira Silvi, yo nunca fui buena en matemática, ni en lógica, pero te puedo decir algo que sé con una total certeza positivista: uno más uno, es dos irremediablemente y siempre. Yo no soy medio como para hacer un entero con otro. Yo tengo dos partes que hacen al todo. Como puede alguien pretender completarme, si yo no lo hago primero?

Sabes que es lo peor de todo? Que no tenía que ser así… (...)si, ya lo sé… cuál es la manera? Quién sabe? No digo que yo sí, solo digo que yo quería que fuera de otra forma, siempre supuse que me conocía bien para saber cómo!

(...)No Silvi, no insistas más por favor. No sé está bien o no, pero mi decisión es la cueva. Es por esto en realidad que te llamo, no nos vamos a poder ver este jueves. No voy a estar para nadie, ya dejé todo arreglado.

En cuanto vuelva te llamo. Gracias por todo.
(cuelga)

2 comentarios:

Natalia Figueira dijo...

qué bien! qué bien!.... hay que darle forma a los sentimientos, a la necesidad de cueva...y eso hiciste... muy bueno amiga!
Una llamada (a sí misma?), un reflejo en el espejo (laberíntico), y saber...todo el tiempo saber qué nos sucede, y sinembargo no poder llenarnos con ninguna respuesta, con ninguna cita el jueves.
Te amo!, no te canceles a vos misma

Anónimo dijo...

me mataste con lo del perfume, muchos recuerdos, pero muchos, jajaja
beso idola
(pau cane)